Virginia, después de renunciar a la vida religiosa, sintió la vocación como laica consagrada. Bajo la dirección espiritual del P. Sayós, SJ, hizo su primera consagración privada temporal en diciembre del año 1961. Poco después en 1963 Virginia con varias amigas, en su mayoría ex alumnas del Colegio de las Esclavas del Sagrado Corazón, se constituyó el Grupo de Oración de las Obreras de Cristo “Nuestra Señora de la Merced”, emitiendo su consagración privada con promesas similares a los votos religiosos y manteniendo una estricta reserva sobre su consagración. Este Grupo se incorporó a la Asociación de los Grupos de Oración y Amistad, fundada en 1969 por Mons. José María Casés Deordal, Obispo de Segorbe Castellón, y aprobada por la Conferencia Episcopal Española en 1987. Después de la muerte de Virginia el Grupo de Oración de Cochabamba se constituyó en Promotor de la Causa de Beatificación y Canonización de la Sierva de Dios, manteniendo viva su memoria.