VIRTUDES TEOLOGALES

Hay unanimidad en los testimonios en afirmar que las virtudes teologales fueron el sello distintivo de la vida de Virginia. Se entregó por completo a Dios y al hacerlo su fe se acrecentó, se hizo roca inquebrantable y manantial de esperanza en las promesas divinas. Si bien ella manifestó en varias ocasiones cierto miedo a la muerte, no dudaba de la vida eterna prometida por el Señor.
La misma Sierva de Dios expresa su unión mística con Jesús, confiando totalmente en Él e incluso para adentrarse en el Corazón llagado, tal como expresa ella misma en bella poesía:

Todo Jesús te lo doy

Es mi entrega sin reserva.
Sólo para Ti conserva.
Cuanto tengo y cuanto soy
Te entrego mi corazón.
Te entrego mi vida.
Mis resistencias olvida.
Dame tu gracia y tu perdón.
El timón te doy a Ti
Dirige Tú mi barquilla.
Mar adentro… o a la orilla.
¡No me consultes a mí!
¿Y mis pecados Señor…?
Quémalos en tu costado.
En tu corazón llagado.
¡Con el fuego de tu amor!
23 – XII 1962.

Los testimonios coinciden en la manera heroica en que Virginia vivió las virtudes teologales: Durante el tiempo que la conocí podría asegurar que Virginia vivió heroicamente la fe, la esperanza y la caridad. Era una santa: Hno. Salvador Sanchis Llop, SJ, Test. Preprocesal .